El Gobierno de Aragón, en su firme apuesta por la logística y su consolidación, ha organizado una jornada en la que se ha reclamado la declaración de una zona franca para el aeropuerto de Zaragoza, con el convencimiento de que su conexión con la plataforma logística de Plaza será un aldabonazo para reforzar el potencial logístico de la Comunidad y que las ventajas fiscales que aporta su instalación «culminaría la apuesta de Aragón por convertirse en una plataforma logística líder en la Europa del Sur», según ha explicado el Presidente de Aragón, Javier Lambán, que ha clausurado la jornada.
La petición formal y administrativa se tramitará la próxima semana, si bien hoy se ha escenificado en la jornada celebrada y que además ha sido transmitida esta misma mañana a las representantes del Gobierno de España que han asistido a un desayuno informativo organizado por El País sobre el futuro de Aragón.
Lambán ha recordado la labor de su ejecutivo para impulsar las conexiones ferroviarias como las del Corredor Cantábrico-Mediterráneo en la línea Zaragoza-Teruel-Sagunto, junto con la Comunidad Valenciana, o la autopista ferroviaria Zaragoza-Algeciras, en colaboración con la Junta de Andalucía, y cree que «la guinda del pastel» es conseguir que el Aeropuerto de Zaragoza sea una zona franca para el tránsito de mercancías por la vía aérea. Precisamente, la jornada organizada hoy en la sede del Gobierno de Aragón significa elevar la petición al Gobierno de España con el apoyo del sector económico aragonés.
La ministra de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana del Gobierno central, Raquel Sánchez, ha anunciado que a principios de 2023 se licitará la reforma integral de la segunda pista de aterrizaje de este aeropuerto, “el segundo en carga aérea tras Barajas” y ha recordado que su nueva terminal de carga estará operativa antes de final de año, noticia que ha sido bien acogida por el presidente aragonés. No obstante, la importancia de una decisión político-administrativa de este calado no requiere de grandes inversiones económicas, sino que, según Lambán, «en Zaragoza tiene su fundamento porque estar lejos del mar no puede condenarnos eternamente a ser una zona secundaria en materia de tráficos aéreos mundiales. La apuesta de Aragón por la logística y la capacidad de sus agentes hacen que una zona franca debería ser la culminación normal de esos esfuerzos y antecedentes».
Lambán describe la importancia de una zona franca
Lambán: guinda del esfuerzo en materia de conexiones para la logística
Lambán no cree que exija grandes inversiones económicas
Por su parte, la consejera de Economía, Planificación y Empleo, Marta Gastón, ha subrayado que “la logística forja alianzas y es imparable; es mucho más que un sector estratégico, es un vector transversal que permite el desarrollo de otros sectores y un factor de competitividad de primer orden”. Para la optimización e impulso de esta “gran ventaja competitiva” con la que cuenta nuestro territorio, Gastón ha señalado la necesidad de “ir de la mano del tejido empresarial aragonés”, una colaboración que se ha “forjado” y en la que se ha profundizado durante estos últimos cinco años a través de Aragón Plataforma Logística (APL), sociedad adscrita a CORPORACIÓN.
Un “trabajo conjunto” que es necesario también para lograr la Zona Franca y para seguir con el proceso de “mejora continua y el continuo incremento de la competitividad” de nuestra Comunidad Autónoma, ha explicado la consejera de Economía y presidenta de APL, que considera que conseguir este nuevo hito supondrá un “posicionamiento todavía mayor y más importante para Aragón como ‘hub’ logístico”.
Activo adicional
El Gobierno de Aragón, a través de Aragón Plataforma Logística (APL), quiere impulsar desde hace varios años una zona franca en nuestro territorio con ventajas aduaneras y tributarias para las empresas y para el intercambio de mercancías.
Una zona franca es un activo adicional para la captación de inversiones que nos consolidaría como plataforma de distribución mundial. Zaragoza dispone de superficie suficiente que, junto a la situación geoestratégica, las infraestructuras y conectividad, y la estructura productiva de Aragón permiten prever que la implantación de esta iniciativa sería muy atractiva. Permitiría promocionar la actividad económica de la zona, y en particular el comercio exterior, y convertirse en “puente” de otras zonas francas.
En concreto, las zonas francas son una parte del territorio en el que las mercancías se encuentran fuera del territorio aduanero en relación a aranceles e impuestos de importación. En ellas, además de almacenarse mercancías por tiempo ilimitado, puede llevarse a cabo la transformación y fabricación de productos que utilicen subproductos o materias primas importados de terceros países, cuyo destino sea la exportación, sin pagar aranceles.
En Europa, hay 20 países que disponen de zonas francas en sus territorios, entre ellos, España, que es el segundo Estado con mayor número de estas áreas, solo por detrás de Croacia. En nuestro país hay actualmente siete zonas francas: Santander, Barcelona, Vigo, Cádiz, Tenerife, Las Palmas de Gran Canaria y Sevilla.
Las distintas adaptaciones a la normativa comunitaria han suprimido los requisitos de que deban estar situadas en el litoral, aisladas del núcleo urbano, con un Puerto al menos adyacente y en la jurisdicción de una Aduana marítima, si bien se ha añadido la necesidad, por motivos de seguridad, de que las zonas francas sean espacios cerrados en todo su perímetro.
Las zonas francas en la Unión Europea tienen un alto prestigio y son muy valoradas tanto por las propias Aduanas como por los organismos internacionales, como la Organización Mundial de Aduanas y la Organización Mundial de Comercio. Por ello, disponer de una zona franca dentro de la Unión Europea puede ser, comercialmente, de gran interés.
Además, existen distintas asociaciones de zonas francas, tanto nacionales, como regionales y mundiales. La incorporación a las mismas es un elemento fundamental para el desarrollo y proyección de la zona franca y del territorio a nivel comercial.
En España, la autorización de una zona franca corresponde exclusivamente al Ministerio de Hacienda y debe publicarse en el Boletín Oficial del Estado su aprobación por medio de la correspondiente Orden Ministerial. La gestión y fomento de una zona franca corresponde a su máximo órgano de representación y decisión: el Consorcio, que actuará como Consejo de Administración.
En 2018 se creó el Fondo de compensación de los Consorcios de Zona Franca cuya fuente de ingreso es el Impuesto de Sociedades que liquidan las empresas allí establecidas. Esto comporta un ingreso adicional de gran importancia paras las zonas francas, lo que podría ser valorado muy positivamente por las empresas allí instaladas al comprobar que su Impuesto de Sociedades se reinvierte en la propia zona franca.
Referente logístico
La implantación de una zona franca en el territorio supondría un hito más en la consolidación de Aragón como referente logístico del sur de Europa e incrementaría todavía más las enormes expectativas de futuro de la Comunidad ligadas a este sector, motor a su vez de otros sectores económicos estratégicos.
La zona franca se sumaría a otros destacados proyectos como la puesta en marcha de la autopista ferroviaria entre Zaragoza y el Puerto de Algeciras o la ampliación de la terminal ferroviaria de PLATEA para seguir impulsando la intermodalidad en las plataformas públicas aragonesas, o como el importante incremento de suelo logístico para poder acoger nuevos proyectos empresariales. En este último ámbito, destaca la ampliación de Plaza y la puesta en marcha de la nueva plataforma logístico-industrial en Zuera.
En las plataformas públicas aragonesas se han vendido más de 1,6 millones de metros cuadrados desde el año 2015 gracias a la posición geoestratégica de la Comunidad Autónoma, su intermodalidad, y el trabajo, desde la colaboración público-privada, para consolidar la logística como sector estratégico y seguir atrayendo inversiones ligadas a él.
Aragón Plataforma Logística aglutina esa apuesta estratégica del Gobierno de Aragón por el sector logístico y permite integrar una oferta global de suelo de excelente calidad en Zaragoza (Plaza), Huesca (Plhus) y Teruel (Platea), a la que se suma ahora la nueva plataforma en Zuera, interconectado por tierra, mar y aire con los principales centros económicos. Esta oferta de suelo viene complementada con una formación de primer nivel en logística –a través de la Universidad de Zaragoza y, en concreto, de la Cátedra APL, o del Zaragoza Logistics Center- y con centros de innovación en el sector como ITAINNOVA.
El impulso de APL ha puesto en valor la posición estratégica preexistente: la capital de la Comunidad reúne el 60% del PIB español en un radio de 300 kilómetros. Una de las pruebas que confirman estos frutos y el potencial aragonés en logística ha sido el desembarco de firmas referentes como Amazon o la ampliación del centro logístico de Inditex en Plaza, entre otros muchos ejemplos de compañías que han decidido implantarse o crecer en la Comunidad Autónoma.
El sector logístico representa en Aragón más del 5,5% del PIB y cuenta con casi 26.000 afiliados a la Seguridad Social, unas cifras que continuarán creciendo con todos los proyectos empresariales que están desarrollándose.
En la jornada «Zona Franca en Plaza: incremento en competitividad y posicionamiento logístico», ha contado con la participación de los presidentes del Gobierno de Aragón y de la Cámara de Zaragoza, Jorge Villarroya, así como de la consejera de Economía, Marta Gastón; el jefe regional de Aduanas e Impuestos Especiales de la Agencia Tributaria, José Francisco Casajús, y del presidente de Alia, Cluster Logístico de Aragón, Eduardo Corella.